El aceite de oliva es uno de los ingredientes más utilizados en las preparaciones gastronómicas. Para obtener este aceite, se requiere de un proceso que incluye el uso de filtros magnéticos.
Pasos para preparar aceite de oliva
La preparación del aceite de oliva requiere de seguir una serie de pasos esenciales, con los cuales se obtiene el líquido final que se utilizará para las preparaciones gastronómicas.
Puedes prepararlo de manera artesanal o industrial, en ambos casos, el procedimiento general es el siguiente.
Recolección de aceitunas
Lo primero que se debe hacer es recoger las aceitunas en el cultivo, esto se puede realizar de manera mecanizada o a mano. Se trata de una actividad entretenida y sana, que se puede realizar con amigos o la familia.
El proceso de recolección no es complicado y dependiendo de cuánto aceite deseas preparar, puede demorar más o menos.
Molturar las aceitunas
Después de recolectar las aceitas en mejores condiciones, lo siguiente es separarlas de las ramas y de las hojas caídas. Es necesario limpiar muy bien las aceitunas antes de comenzar a triturarlas, para así obtener un mejor aceite.
En la antigüedad se utilizaron piedras de molino para triturarlas, pero hoy día se emplean molinos de martillos, aunque en el mercado puedes encontrar otros aparatos que te ayuden con este paso.
Batir la masa
El tercer paso es batir la masa para desligar el aceite, este proceso debe realizarse durante una hora, manteniendo una temperatura entre 24 y 27 grados. Gracias a esto, es más fácil desligar el aceite del resto, como de la pulpa, el hueso y la piel.
Además, es importante no subir más la temperatura, de lo contrario no obtendrás un aceite de primera prensada en frío.
Presionar la masa
Para la extracción del zumo, es necesario ejercer una presión mecánica sobre la masa batida. Si lo preparas de forma artesanal, puedes utilizar la técnica de prensado de la masa, la cual se usa desde la época romana.
En cualquier caso, hay prensas que funcionan de forma rápida y sencilla, permitiendo extraer el zumo de las aceitunas de manera limpia y eficiente.
Decantar el aceite
La etapa de decantación permite separar el aceite de oliva del agua y de los sólidos, los cuales se cuelan en el zumo después de exprimirlo. Es un proceso natural que permite separar el aceite de forma sencilla, gracias a la diferencia de densidades.
Después de varios días, dentro de una temperatura controlada, y mediante uno o varios recipientes de decantación, puedes extraer por la parte inferior las impurezas y dejar limpio el aceite.
¿Por qué usar los filtros magnéticos?
Cuando realizas el proceso de decantación, consigues filtrar y quitar las impurezas y restos de humedad que quedan en el zumo de oliva. Al tratarse de un proceso natural, no se alteran demasiado las propiedades del aceite original.
Sin embargo, tienes la opción de usar los filtros magnéticos para separar las partículas metálicas del aceite, y conseguir mejores resultados.
Los filtros magnéticos son herramientas útiles para filtrar los elementos impuros presentes en el zumo, como los componentes metálicos, permitiendo que el aceite de oliva resultante sea de adecuado para el consumo humano.
Estos filtros emplean un imán para capturar las partículas contaminantes y usa un papel de celulosa o de filtro, con los cuales atraen las partículas de metal y las filtran, evitando que estos sólidos permanezcan en el aceite.
Cuando se filtra el aceite de oliva, se deja reposando en un papel de filtro para garantizar que está totalmente limpio y sin impurezas, para después almacenarlo adecuadamente.
No contar con los filtros supone un grave problema si buscas un aceite de oliva de calidad, sobre todo si utilizas limpiadores y lavadoras para la etapa de molturación del proceso de elaboración del aceite.
De igual manera, cuando no se filtra bien el aceite de oliva, los sólidos presentes en el zumo pueden atraer la humedad, provocando fermentaciones.
O bien, el aceite será menos estable, esto genera diversos cambios en el sabor, olor y color a corto plazo.
¿Cómo se recogen las aceitunas?
Existen diferentes formas de recolectar las aceitunas en los campos donde están los olivos, siempre que lo hagas en un momento adecuado de su maduración, para que el aceite resultante sea de mayor calidad.
El primer método de recogida es a mano, puedes usar un rastrillo pequeño o rasqueta, depositando las aceitunas en una malla de plástico, o en una manta en el suelo. Esto permitirá que las transportes mejor hasta la zona donde prepararás el aceite.
El otro método es la recogida de aceitunas por sacudido, para lo cual se sacuden las ramas sobre mantas en el suelo, y obtener así los frutos. Hay máquinas vibradoras multidireccionales que sacuden las ramas, permitiendo que el proceso sea más rápido.
También puedes recolectar las aceitunas con el método de vareo, donde golpeas los frutos con varas para que caigan en las mantas en el suelo. Sin embargo, no es el más recomendado por dañar los frutos.
Siguiendo estos pasos y utilizando los filtros magnéticos, resultará más sencillo elaborar un aceite de oliva artesanal de primera calidad, permitiendo obtener un líquido que destaque por su sabor, aroma y olor, y se encuentra totalmente limpio y libre de impurezas.